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domingo, 19 de julio de 2015

La Luna, un misterio en el cielo

La Luna siempre nos ha generado en la humanidad fascinación y una gran cantidad de leyendas desde el principio de los tiempos. Ella controla nuestras vidas, rige las mareas, las cosechas y quizás nuestro propio comportamiento, no por nada se llama lunáticos a los locos o como bien conocen las autoridades, los crímenes aumentan en noches de Luna llena o Luna nueva.
 
La imaginación se nos desborda cuando hablamos de ella, los primeros extraterrestres del imaginario colectivo eran selenitas, en ella escritores y Hollywood han imaginado bases nazis y desde que el 21 de Julio de 1969, Amstrong diese ese pequeño paso para un hombre pero un salto para la humanidad, mil teorías de la conspiración.
 
Pero a lo largo de los tres artículos en los que hablaré de la Luna, no os voy a hablar sobre el misterio de si el hombre ha pisado la Luna o no (para mí es irrefutable que sí), de si las fotografías del Apolo XI estaban trucadas, de las innumerables luces extrañas que se han visto en su superficie y que podrían tener una explicación razonable: partículas energéticamente cargadas, rayos cósmicos, gamma... que pueblan el Universo y que podrían producir esos efectos atmosféricos-espaciales de los que desconocemos prácticamente todo.
 
Tampoco de las extrañas formaciones que existen sobre la superficie lunar, como la existencia de supuestos monolitos (también "encontrados" sobre Marte, Phobos...) que pueden explicarse como un efecto óptico que por la posición del Sol haga que la sombra de algunas rocas aparezcan más alargadas y creamos ver lo que no hay. Si no acepto como un misterio lo que otros lo dan por sentado es, como ya sabéis, por la máxima Sherlockniana que aplico a estos asuntos:  "cuando todo lo demás es descartado lo que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad". En estos casos la teoría de la conspiración no es desde luego ni la única ni la más plausible.

De todas formas os dejo una muestra de las imágenes más extrañas tomadas sobre la luna para que las juzguéis vosotros mismos:



 
Arriba dos fotografías de la sonda LUNAR ORBITER 3 (1966), en la que algunos observan una construcción de dos kilómetros de altura, sumamente erosionada, que se le denomina el SHARD.


La imagen de la derecha es del archivo de NASA. La de la izquierda fue tomada en 2010 por el orbitador lunar chino: Chang'e-2, donde algunos aprecian un edificio o estructura artificial. En cualquier caso, por su escasa definición en las primeras no puedo afirmar que no sean rocas naturales y por desconocer en las segundas si son zonas donde los astronautas realizaron algún tipo de trabajo, tampoco puedo darlas por pruebas de nada.

Y por supuesto no puedo dar crédito a filmaciones como las de la visita de los astronautas de la NASA a supuestos complejos alienígenas abandonados o a las famosas y supuestas grabaciones de conversaciones entre astronautas en las que afirman que están viendo extraterrestres, pues no han sido escuchadas, ni verificadas por sus protagonistas... debemos trabajar sobre hechos, no sobre rumores.
 
¿Eso nos deja sin misterios a la Luna? - me preguntaréis sin entender el encabezado del artículo. Ni muchísimo menos, no hemos visto ni la punta del iceberg... pero creo que es importante primero separar la paja del grano para no enturbiar los auténticos interrogantes que plantea la Luna.
 
Empecemos por los que me generan más dudas. Respecto a la existencia de estructuras lunares, solo existe una fotografía que me causa verdadero desconcierto, aunque tampoco descarto un origen natural de la siguiente formación que aparece en una fotografía real y no manipulada de NASA, en la zona denominada círculo de Vocleydus:
  
 
  
La existencia de líneas y ángulos rectos en la naturaleza es muy rara aunque no imposible como se afirma alegremente, solo hay que ver las columnas de basalto. Pero la existencia de un cuadrado perfecto... lo dejaré ahí, confieso que sin atreverme a dar una opinión más explícita sobre la fotografía, aunque sin duda si ésta hubiese sido tomada en la Tierra sería un lugar donde excavaríamos en busca de restos, los hallásemos o no.
 


Como concesión a los amantes de las teorías de la conspiración aunque en contraposición a ellos, para mí la gran pregunta no es si hemos ido a la Luna, sino ¿por qué no hemos vuelto? Es algo que escapa a mi comprensión. Sé que es un mundo polvoriento y rocoso, sin atmosfera y sin vida pero no carente de interés al contrario de lo que pudiéramos pensar. ¿Por qué no hemos vuelto a pisarla? ¿Por qué no hemos enviado una, dos o diez Mars Rover a Mapear la superficie? ¿Cómo es posible que a día de hoy la web google Moon nos ofrezca  imágenes de increíble resolución de su superficie pero solo nos muestre con esa calidad regiones muy concretas y acotadas de la Luna? ¿Por qué no muestra el resto? ¿Por qué no tenemos ya módulos lunares, a imagen de los de la ISS, y establecido una base lunar permanente? ¿Acaso a día de hoy podemos pensar que podamos alcanzar un logro mayor que establecer una colonia humana fuera de nuestro planeta?

Algunos atrevidos osan argumentar: "porque la Luna no tiene interés científico...", la ignorancia es siempre muy atrevida. No tan recientemente se ha descubierto que existe hielo en los polos lunares, como podréis imaginar si en algún lugar podemos encontrar vida extraterrestre, aunque sean microorganismos, es en el agua, ¿no tiene interés enviar una sonda o una misión tripulada a ese hielo lunar? ¿De verdad?

Estación Espacial Internacional, ISS
Pensemos que NASA está inmersa en el futuro envío de una misión tripulada a Marte, incluso alguna empresa privada se está planteando enviar humanos a colonizarlo sin retorno (dejo de lado la polémica de que sea solo un montaje publicitario y no haya auténtico interés por llevar el proyecto adelante). Los astronautas deberán vivir durante unos meses sobre Marte antes de poder regresar, pues un viaje hasta el planeta rojo no es ir, estar tres días y volver como ocurre en la Luna, deberán pasar meses en un mundo desconocido hasta que el viaje de regreso sea factible. De hecho se calcula que los astronautas deberán pasar unos dos años fuera de nuestro planeta. Por ello se realizan programas para batir records de permanencia en el espacio  y yo me pregunto: ¿qué mejor lugar para testar dicho viaje que la Luna? Donde nuestros héroes espaciales no sufrirán las nefastas consecuencias físicas de la ingravidez de la ISS, donde podrían probar el material que necesitarán en Marte: soportes vitales, vehículos, receptáculos habitables...

¿Por qué no probar primero a vivir dos, tres o los meses necesarios sobre la Luna antes de enviarlos a semejante misión? En la Luna, si algo saliese mal, podemos enviar una misión de rescate, pues a nivel planetario nuestro satélite está a la vuelta de la esquina. Además, ¿Qué interés tiene enviar físicamente a un humano a Marte si es un planeta tan muerto e inerte como la Luna? Más cuando lo podemos explorar sin arriesgar la vida de nadie con robots como la Mars Rover.

También me resulta increíble que no hayan planes para establecer una especie de ISS en la Luna desde el punto de vista económico. Si, como lo oís. Pensad que la energía del futuro y que es probable que tengamos en 20 años, será la fusión nuclear, la cual sustituirá a la actual fisión pues logra muchísima más producción energética que nuestros actuales reactores nucleares y no tiene los inmensos inconvenientes actuales de los residuos radioactivos, pues no los genera. Pero existe un problema, uno de sus combustibles es el tritio, un isótopo del hidrogeno, muy escaso en la naturaleza terrestre pero muy abundante en la superficie lunar. Pero no será rentable... - pensaréis algunos, bien, se han hecho los cálculos: Una lanzadera espacial que regresara a la Tierra con 900 kg de este isótopo reportaría a la compañía la increíble cifra de 6.300 millones de dólares de beneficio. ¿Seguro que no interesa?

Quizás la explicación a estos interrogantes de nuestro abandono de la Luna tengan una explicación en una teoría que suena a fantasía delirante, o al menos así la prejuzgué yo alegremente antes de leer sus fundamentos, propuestos por dos astrónomos rusos: Mijaíl Vasin y Alexander Sherbakov y que no es otra que la Luna debe ser hueca y por tanto artificial. Por favor, no emitáis un juicio antes de leer los siguientes artículos donde analizaremos en profundidad dicha teoría. Quizás luego la descartéis (yo no lo he podido hacer tajantemente) pero podréis comprobar que hay elementos contrastados e indiscutibles que hacen que el relato oficial simplemente no encaje y sobre los que deberíamos reflexionar, sea cual sea nuestra posición final.

 
 
 

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