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viernes, 27 de mayo de 2016

¿Hay vida después de la muerte?

Es la gran pregunta que se ha estado haciendo la humanidad desde el principio de los tiempos y que muchas veces nos la hemos hecho, respondido y variado la contestación. No es una cuestión baladí pues la búsqueda de la solución al interrogante más grande de la vida ha condicionado a la humanidad desde el principio de los tiempos. Las diferentes religiones se han creado alrededor del supuesto conocimiento de la verdad que esconde, vendiéndonos la revelación de ese gran misterio. Cada una de ellas lo ha enfocado de diferentes puntos de vista pero todas afirmando que la existencia no termina cuando nuestro cerebro y corazón dejan de funcionar. Las religiones del libro: judaísmo, cristianismo e islam, la han enfocado (con sus evidentes diferencias) hacia un Dios único dador de esa vida eterna, el budismo e hinduismo hablan de la evolución espiritual y de planos de existencia, el animismo de un mundo de espíritus... podríamos continuar así páginas y páginas.

Frente a esta concepción religiosa están aquellos que no creen que haya nada más allá, que esto termina con nuestra muerte. El ateísmo está muy arraigado en especial entre el mundo científico y curiosamente entre personas que muy probablemente estén más cerca de ser modelos de comportamiento de cualquiera de las religiones que del perfil de humano despiadado y sin sentimientos. Siempre he creído que los dogmas de fe absurdos, en especial en este mundo tecnológico, son máquinas de fabricar ateos... Pero no es el objeto de este artículo el como se ha usado a los diferentes Dioses cómo arma de manipulación y de dominación de masas.

La ciencia nos afirma que hemos de perder toda esperanza, que lo que hay es lo que vemos y cuando se cierran los ojos solo está la nada. ¿Pero es esto cierto? Como sabéis soy químico y por tanto mi pensamiento es científico pero por fortuna me he desprendido de los dogmas de la ciencia, que los tiene y no pocos, y que al igual que en las religiones generan una cerrazón absurda y un negacionismo en ciertos ámbitos que raya lo fanático. No podemos olvidarnos el contexto en el que se mueve la ciencia y que desde hace muchos siglos es la pura y dura oposición feroz a la iglesia. Es una lucha encarnizada entre los idealistas y los racionalistas-pragmáticos que se lleva librando desde hace milenios y que muchos autores han dejado reflejado en libros magníficos, como "El ocho". Son dos bandos feroces entre sí y uno de los puntos claves de esa lucha es si existe o no vida después de la muerte. Hemos de pensar que su existencia es la columna que sostiene el edificio de los idealistas (religiosos) y que muchos científicos (pragmáticos) atacan con ferocidad. A la ciencia le es muy difícil admitir que pueda existir vida tras la muerte pues el hacerlo presuponen que, falsamente, la religión vencería e involucionaríamos al oscurantismo del medievo,... y he de admitir que les entiendo en parte a tenor de las declaraciones de ciertos obispos, imanes... y ni hablamos de los fanáticos ultra-fanáticos del Isis o de otras religiones, causan autentico pavor... pero ese es otro tema. ¿Dónde me encuentro yo? Con ninguno de los dos, pues a mí solo me importa la verdad y ésta tal y como la intuyo, está en medio de ambas posiciones.

Los que habitualmente leéis mis artículos ya sabréis que creo firmemente en que hay vida después de la muerte y que lo hago no desde un punto de vista espiritual o religioso, no. Lo creo desde la más pura concepción científica. No me atrevo a afirmar como es ese otro mundo al que vamos, tampoco puedo afirmar que exista un ente llamado Dios, o si existe un infierno, un cielo o la reencarnación. Pero sí que estoy convencido de que existe, sea lo que sea. Sabéis que estoy firmemente convencido que existen indicios muy claros de que nuestra conciencia no es algo físico insertado en un lugar del cerebro en forma de molécula química, sino que está almacenada en forma de energía cuántica sostenida por nuestra red neuronal. La ausencia de ninguna prueba o mínimo indicio científico de cómo o dónde se almacena, la existencia de casos médicos bien documentados de recuperación de facultades perdidas por traumatismos incompatibles con esa conciencia física, los innumerables fenómenos mal llamados paranormales que tienen explicación con una mente de naturaleza cuántica y que a su vez encajan con las propiedades reales, verificadas científicamente, del mundo de las partículas subatómicas me hacen pensar que el ser humano en su esencia primordial: el yo, no es un ente de carne y hueso, es energético.

La semana pasada el doctor Robert Lanza, considerado por el New York Times como uno de los tres científicos mundiales más importantes, insinuó en su libro: "Biocentrismo: Cómo la vida y la conciencia son las claves para la comprensión de la naturaleza del Universo", que en efecto la vida no parece terminar con la muerte. Lanzó un concepto que hacía tiempo que maduraba en mi cabeza pero que no se atrevía a salir. Lanza teorizó, y estoy de acuerdo con él, que es la conciencia quien genera el cuerpo y no al revés y esa es la razón principal por la que esta no puede morir, pues la ley principal de la ciencia, contrastada como veraz, nos dice que: "La energía ni se crea ni se destruye, se transforma". Muchos no podréis entender como eso es posible, pero la misma ciencia en su hipótesis de la creación del Universo en verdad lo afirma. ¡Hemos estado tan ciegos! En el Big Bang lo que había era una gran masa de energía y partículas subatómicas concentrada que explotó y de esta surgió la materia: Los soles, los elementos químicos, los planteas... en el principio de todo estaba la energía, esa es la fuente original de todo, los pilares de lo que nos rodea. En efecto lo material, lo corpóreo surge de la energía y no al revés.  Si la conciencia es energía cuántica es a partir de ella que se formará nuestro cuerpo y no al revés. Por supuesto eso implica que al morir, la conciencia permanece. ¿Nos quedamos en forma de energía? ¿Pasamos a otro Universo paralelo? ¿Permanecemos en este pero en otro estado de energía? ¿Podemos reencarnarnos de nuevo? No lo sabemos, aunque estoy convencido de que no habrán querubines tocando un arpa cuando crucemos ese puente, debe ser un mundo muy diferente: el paraíso de las partículas subatómicas donde todo es posible e infinito.

Quizás muchas de las predicciones religiosas sean ciertas pues nada impide a una conciencia energética volver a materializarse en materia, es decir, reencarnarse. Quién sabe si en efecto existe un "infierno" o un "cielo", es posible que nuestro estado energético en la hora de nuestra muerte influya si vamos a un plano u otro, pues las partículas cuánticas pueden encontrarse en diferentes niveles de energía... Aunque finalmente se consiga demostrar que esto no termina con nuestro sepelio, la respuesta de si existe Dios o no, seguirá sin responderse científicamente, pues el que haya vida más allá de este plano de existencia no implica necesariamente la existencia de un ser superior, ni tampoco lo contrario. Pero el ser conscientes al 100%, tener la absoluta seguridad de que esto no termina aquí, cambiaría a la humanidad por completo.


El saber que esto es un mero tránsito en nuestra vida haría que relativizáramos las cosas materiales y banales de este mundo, ¿de qué nos serviría acaparar bienes si no nos van a servir de nada? Si somos conscientes de que la finalidad de esta vida es la de crecer en consciencia para pasar a otro plano superior, si sabemos con certeza que nuestros actos llevan a vibrar a nuestras partículas subatómicas en un nivel y no en otro y eso tiene consecuencias nuestras prioridades vitales cambiarían radicalmente. Todas las personas que han sufrido una ECM (Experiencia Cercana a la Muerte) y parecen haber tocado con la yema de sus dedos ese mundo tras este plano de existencia, han sufrido esa evolución de conciencia, de concepto de vida y de objetivos vitales. Pero hay muchos creyentes que a pesar de serlo no buscan esa elevación de su ser - me argumentaréis. Cierto, pero yo os pregunto, ¿esa gente en verdad cree en lo que practican o siguen unos ritos por tradición? Muchos de esos que, para que nos entendamos, en domingo van a misa y el resto de la semana roban, en verdad son unos descreídos y solo se aferran a unas tradiciones absurdas para justificar su mal quehacer diario. Hay un gran refrán que nos dice: Dime de que presumes y te diré de lo que careces. Esas personas si en verdad tuvieran la certeza completa de que hay algo más y que los actos en verdad tienen consecuencias, que lo que en oriente llaman Kharma no es una veleidad el subconsciente, cambiarían radicalmente de forma de actuar. De todas formas esperemos que la ciencia se atreva a quitarse sus tabús y demonios internos, encuentra la verdad y comprobemos si mis suposiciones son verdaderas.








viernes, 20 de mayo de 2016

¿Vivimos en Matrix?

Esta semana abandono de momento el mundo de la conspiración alienígena y me adentro de nuevo en otro no menos apasionante, que poco a poco va revolucionando, y que cambiará, nuestra forma de entender el mundo. La física cuántica nos ha dado la semana pasada dos artículos muy interesantes elaborados por científicos de primer nivel y que ponen en duda los paradigmas sobre los que se basa el pensamiento humano, en especial el científico. Lo más curioso es que, sin ser consciente de que dichos estudios se llevaban a cabo, sus conclusiones y lo que se intuye a raíz de ellos van demostrando de forma científica que mi forma de entender ciertos fenómenos parecen ser más correctos de lo que se podría pensar. Cuando utilizamos la lógica sin prejuicios y/o dogmas de ninguna clase, se puede errar cierto, pero muy probablemente no estemos muy desviados del camino correcto. Mí suposición de que la conciencia, de que el ser humano y en definitiva lo que somos, no es algo físico indisoluble del cuerpo sino más bien una codificación energética cuántica anclada a las neuronas... la física cuántica la va revelando como verdadera.


Esta semana hablaré del primero de ellos, en el cual parece apuntalarse la teoría de que vivimos en un mundo más parecido al que relata la película Matrix de lo que creemos. Para quienes no la hayáis visto, en este film de las Hermanas Wachowski y protagonizada por Keanu Reeves, los humanos viven en una fantasía virtual, ajenos a un mundo real mucho más lóbrego. Ya hace unos cuantos años que desde el mundo académico se va lanzando la idea que la realidad que nosotros percibimos no es tal, pues es muy subjetiva al estar fabricada por nuestro cerebro. Todo lo que vemos, oímos, olemos, tocamos... es fruto de una interpretación de nuestra mente, una aproximación más o menos acertada de la realidad pero que no es la verdad absoluta. Os pondré una serie de ejemplos para que veáis a que me refiero.

Por ejemplo el sentido del tacto es una mera fantasía pues en verdad, y literalmente, jamás llegamos a tocar ningún objeto. Ni cuando acariciamos a un ser querido, cogemos un vaso o pulsamos una tecla del ordenador como estoy haciendo en estos momentos. Como todos sabéis estamos formados por átomos que a su vez contienen electrones, pues bien, dos átomos jamás pueden entrar en contacto pues la repulsión de sus respectivos electrones tiene tal fuerza que es imposible superarla. Así que cuando tocamos con el dedo, por ejemplo un botón del ascensor, no entramos en contacto con él objeto, el último átomo de nuestro dedo y el primero de la tecla siempre se quedarán a una distancia, extremadamente pequeña sí, pero nunca será cero. ¡Pero el botón se mueve! - me diréis algunos, cierto, pero lo hace por la presión de repulsión (como cuando juntamos dos imanes positivos), no porque lo toquemos.

Algo más evidente de lo que estoy diciendo es la percepción de los colores. Si os pregunto ¿De qué color es la bandera de China? Roja, por supuesto - me contestaréis la mayoría de vosotros... ¿Seguro? Para un daltónico es verde... ¿Es menos cierto? No, no lo es, su percepción es tan real como la nuestra, la cual no tiene por qué ser la verdadera. Muchos diréis que el daltonismo es una enfermedad y que ellos son los que ven las cosas de forma errónea, pero... ¿Y si el daltonismo se expandiera y afectara a toda la humanidad? ¿Acaso lo que hoy tenemos por cierto que es rojo no sería verde en ese caso y esa sería la verdad en vez de la actual? Incluso hay personas que ven el mundo en forma de líneas y de energía, sin colores, sin matices... por no decir cómo interpreta "la realidad" un halcón, un murciélago o un gato... vivimos rodeados de personas que en verdad están viendo un mundo diferente a como lo vemos nosotros. Quizás vosotros y yo estemos viendo un mismo paisaje, con los mismos colores pero cada uno lo perciba con una luminosidad diferente... O un caso mucho más profano y evidente: Las lentejas ¿Están buenas o malas? Depende ¿no? Habrá personas que le encantarán, otras que ni fu ni fa y están las que las odian, y todos tienen razón. Espero que con estos ejemplos empecéis a comprender que lo real es muy subjetivo.

Esta misma pregunta es la que se está haciendo muchos científicos y filósofos: ¿Cuál es la verdad auténtica de lo que nos rodea? El profesor de filosofía de Oxford Nick Bostrom fue el primero en planteárselo a nivel científico en su "hipótesis de la simulación", en la que al igual que en Matrix o como si fuésemos los personajes de cualquier juego de ordenador, nuestra vida es un mero videojuego.  Esta forma de pensamiento no es novedosa pues está presente en muchas tradiciones filosóficas y religiosas desde hace miles de años, sobre todo en la orientales como la budista, la hindú o la taoísta. Para ellos el mundo de los cinco sentidos humanos es irreal y parece que la mecánica cuántica les empieza a dar la razón. Pero no se va en esta dirección sólo desde el mundo filosófico, los físicos cuánticos también apuntan en esta dirección.

Entonces, ¿qué es lo real? - os preguntaréis. Sin duda el mundo auténtico es el que se deriva del origen de todas las cosas. Desde mi punto de vista nuestra vida diaria es un mero reflejo del mundo subatómico. La verdadera realidad es la de los átomos, la de las partículas subatómicas, como en el mito de la caverna de Platón, nosotros solo vemos sombras reflejadas en una pared. Lo que percibimos es un envoltorio y no lo real, al igual que en nuestra casa vemos una imagen superficial muy pobre de lo que esconde: Cemento, ladrillos, cámaras de aire, tuberías, cables eléctricos, barras de acero... Las propiedades de nuestra casa: resistente, fresca, calurosa, sin ruidos, con ellos... no son una propiedad intrínseca de la casa si no de la suma de propiedades de los materiales de las que está hecha. En el ser humano ocurre lo mismo, somos un reflejo de nuestro interior. Quizás incluso yo me esté quedando corto, pues empieza a emerger en mi mente la idea de que la verdad primigenia incluso vaya más allá de los átomos y de las partículas que los componen, pues en el principio del todo, eso que se conoce como Big Bang, estaba la energía cuántica y la luz.

¿Por qué es tan importante saber que es lo real? Muchos pensaréis que en nada nos afecta, que lo importante es "lo que se puede tocar" y el resto una mera discusión filosófica. Yo no lo veo así, es más, pienso absolutamente lo contrario: es primordial. Conocer la realidad auténtica, las propiedades de lo verdadero es conocer los límites y capacidades  de nosotros mismos. Si lo real es lo energético y nosotros surgimos de esa energía, de esos átomos lo que somos, nuestros problemas, capacidades, defectos y virtudes emanarán de ahí. Estoy convencido que el ser humano tiene muchas más capacidades de las que muestra y que están castradas por el desconocimiento de lo que somos, y lo creo no porque crea en la magia o en lo paranormal, sino porque esas capacidades están presentes en los átomos y por tanto en nuestro mundo humano se deben poder manifestar de un  modo u otro. Ese conocimiento de nosotros mismos es fundamental para dar el siguiente y quizás definitivo salto evolutivo del ser humano que revolucionará y cambiará por completo nuestro pensamiento y nuestra civilización. Uno de los más claros ejemplos de lo que hablo lo veremos en el siguiente artículo, en el que la cuántica parece estar al borde de demostrar que hay vida más allá de la muerte.


viernes, 13 de mayo de 2016

¿Nos preparan para un contacto alienigena?

En estas semanas pasadas vimos cómo se nos ha manipulado sobre lo que debíamos creer respecto a la naturaleza de los OVNI, como ha habido desde hace décadas un intento de implantar  en un nuestra mente colectiva una visión de lo que podrían ser y querer de nosotros los extraterrestres. La existencia de esta conspiración es real y palpable, el porqué y el fin de la misma es lo que queda más difuso y es difícil de determinar. Cada cierto tiempo surgen declaraciones sorprendentes de personas relevantes del ámbito militar, político y científico que ponen en el candelero la temática ufológica. En este último artículo respecto a los OVNI y a través de estas declaraciones, trataré de poner encima de la mesa unas cuantas piezas más de un complejo puzle. Un análisis de las mismas quizás nos revele el objetivo final de todo este entramado de mentiras, verdades, ocultación y manipulación.
 
Como todo lo que rodea a esta temática, dichas afirmaciones públicas de personajes relevantes solo hacen que añadir más confusión si cabe a una madeja ya de por sí muy enredada. De hecho suelen surgir varias a la vez que por supuesto se contradicen unas de otras. Muchos afirman que es un método de ocultación: Informar y desinformar al mismo tiempo para mantener a la población confundida (con la verdad te engaño) sobre la naturaleza OVNI, también como herramienta para desviar la atención del votante  de los problemas causados por los políticos, ya sabéis: crisis, grandes escándalos... 
 
¿Pero qué hay de cierto en dichas afirmaciones? Empezaré por la segunda de las teorías pues creo que es la más débil. Antes de empezar, quiero que seáis conscientes que una conspiración de esta naturaleza, alcance y duradera en el tiempo no se hace por nada, ni para tapar problemas pasajeros, a pesar de que en efecto los políticos tratan de usar el tema alienígena para desviar la atención. En su día lo hizo la administración de Bill Clinton o hace unas semanas su propia mujer, Hillary, ha tratado de ganar votos en las Presidenciales americanas que se avecinan declarando que se desclasificará los archivos OVNI si es elegida Presidenta. Pero ese no debe ser el fin principal de un entramado tan complejo que dura ya casi 7 décadas. Además, ¿Un padre se va olvidar de que su hijo pasa hambre por la crisis porque alguien vaya insinuando que si los aliens existen o si quieren esto o lo otro? Es evidente que no, al menos a mí me lo parece. No, debe de haber algo mucho más profundo detrás de todo esto.

 
Como método de ocultación no hay nada mejor que sobre-informar a la opinión pública. Si saturas las televisiones de gente a favor, en contra, frikies y teorías de todo tipo al final cualquiera se aburre de escuchar lo mismo y deja de tener interés aunque alguien esté diciendo la verdad, pues ¿cómo discernir si algo es la verdad, un reflejo de la misma, una media-verdad o una completa estupidez, si no hay acceso a la documentación clasificada?...  Pero echemos un vistazo atrás y veamos con perspectiva las declaraciones científicas al respecto de la posibilidad de vida inteligente. En las décadas de los 40 y 50 afirmar que existía vida fuera de La Tierra era sinónimo de ser un descerebrado, incluso afirmar que existían otras Tierras en la galaxia eran motivo de chanza, burla y desprestigio... Esta semana se han descubierto otros 1.400 nuevos planetas en estrellas cercanas. Pero poco a poco esa visión ha ido cambiando, con el paso de los años se ha ido aceptando que quizás hubiese vida bacteriana en algún punto nuestro sistema solar. Luego que es posible que existieran otros mundos en otras estrellas también con vida, siempre bacteriana y jamás inteligente y así gradualmente hasta nuestros días en los que se ha dado el gran salto y se ha aceptado la existencia de planetas lejanos y de vida inteligente pero siempre afirmando que sería imposible que sepan de nuestra existencia.

Yo no creo que los científicos de los 40 y 50 fuesen estúpidos y   no fueran capaces de entender que pensar que solo existían planetas alrededor de nuestro Sol era una estupidez de tamaño gigantesco. Tampoco me los imagino no ser conscientes de que con tantos millones de estrellas por galaxia y tantos miles y miles de galaxias no hubiese un lugar con las condiciones adecuadas para la vida. Lo sabían y no dijeron nada. ¿Por qué? Es evidente que algo sucedió pues sus antecesores, los hombres de ciencia de principios del XX, no eran escépticos a la posibilidad de vida por ejemplo en Marte. ¿A qué se debió ese cambio? Si miramos la evolución de la información solo hay dos posibilidades.

La primera, evidente, es que nos han estado preparando para darnos la noticia de la existencia de vida alienígena. Todo apunta a que han estado dosificando la información, sacándola con cuentagotas para que nos vayamos acostumbrando poco a poco y no sea un shock cultural y un derrumbe de creencias. No es ninguna veleidad del subconsciente y sea acertada o no, esta teoría  tiene una base sólida sobre la que asentarse. Si os fijáis, espaciadas casi milimétricamente en el tiempo, personas importantes del ámbito político, científico, militar e incluso religioso han afirmado que la existencia de los OVNI'S y de la visita de alienígenas es real y que luego se quedan en nada. Serían como globos sonda que van tratando de verificar como reaccionamos ante dichas noticias y comprobar si estamos preparados para la gran noticia.

En este sentido tenéis declaraciones de Presidentes norteamericanos como Ronald Reagan, de cuyo extraño discurso en sede de la ONU os hablé semanas atrás. O de Jimmy Carter y su encuentro con un OVNI durante un vuelo antes de ser Presidente y que siempre mantuvo como verídico hasta su muerte. Lo cual no deja de ser revelador, pues yo en su lugar lo primero que hubiera preguntado al acceder al despacho oval sería si lo que vi era un experimento militar... Y a buen seguro que él lo hizo y nadie le aclaró nada. Declaraciones de importantes políticos como Paul Hellyer, ex-ministro de defensa de Canadá que afirma que es conocido por todos los gobiernos que los extraterrestres llevan visitándonos desde hace miles de años afirmando que verificó que un 20% de los casos de avistamientos que llegaron a sus manos eran reales y de origen desconocido.

Senadores norteamericanos como Mike Gravel aseguran que civilizaciones inteligentes nos vigilan. O el ex-gobernador de Arizona y ex piloto de combate, quien tras el avistamiento de una nave gigantesca en forma de V sobre la ciudad de Phoenix se burló en los medios de TV de la teoría alien dando por buena la teoría de una formación de aviones militares. Años más tarde reconoció haber mentido, afirmando que él mismo había visto el gigantesco objeto, el cual estaba muy por encima de las posibilidades técnicas humanas en tamaño y maniobrabilidad. También admitió que en las Fuerzas Aéreas estaban tan desconcertados como él y que nadie supo darle una explicación.

Otras situaciones se podrían tildar de esperpénticas, como hace unos pocos años, cuando la ONU trató de crear una Embajada Extraterrestre que se paralizó por el enorme escándalo que se generó pues estábamos en la cúspide de la crisis. ¿Eran unos inconscientes y caraduras de Naciones Unidas tratando de sacar dinero y poltronas donde vegetar cómodamente de forma descarada? Demasiado burdo, debían saber el revuelo que se levantaría ¿No creéis? No creo en las casualidades y menos cuando en esas fechas el papa Francisco afirmó que no era incompatible la vida extraterrestre con la fe cristiana:

“Por ejemplo, mañana viene una expedición de extraterrestres, y algunos de ellos se acercan a nosotros, aquí… extraterrestres, verdes, con esa nariz larga y orejas grandes, al igual que los que pintan los niños, y uno dice: “¡Quiero ser bautizado! ¿Qué pasaría? La Iglesia no debe “cerrar las puertas” a cualquier persona o ser extraterrestre y que deben de ser aceptados como iguales".

¿A qué viene semejante declaración? o la de Jose Gabriel Funes, director del Observatorio del Vaticano, quien habló abiertamente sobre la posibilidad de la vida extraterrestre inteligente en L’Osservatore Romano, diario del Vaticano, en un artículo titulado: “El extraterrestre es mi hermano” o la del jesuita Guy Consolmagno:

“La idea de que haya otras razas y otras inteligencias no es contrario al pensamiento cristiano tradicional. No hay nada en la Sagrada Escritura, que podría confirmar o contradecir la posibilidad de la existencia de vida inteligente en otras partes del universo”.

¿No suena como si nos estuvieran preparando para que no se derruya de golpe nuestros esquemas mentales? Algo se mueve y más cuando los militares parecen haber recibido luz verde para hablar de los OVNI, como en el caso de España Javier Cámara, el famoso coronel del aire que en el programa de Cuarto Milenio está revelando casos de avistamientos por parte de militares de objetos imposibles de asimilar a tecnología conocida, dando incluso datos que van más allá de los registrados en los informes y más extraordinarios de lo que creíamos. O del que fue testigo el General Conceicáo e Silva, quien sería el Jefe del Ejército del Aire de Portugal y que afirmó haber visto una aeronave de la que dijo literalmente: "Son extraterrestres con total seguridad, solo espero vivir el tiempo suficiente para saber quiénes son y de donde vienen".

¿Nos preparan para ese contacto? ¿Por qué ahora y no antes? Hay una explicación más que plausible y que ya os adelanté en el artículo anterior, según mi punto de vista ellos solo intervendrían en los asuntos humanos en caso de que fuéramos una amenaza para el ecosistema del planeta o para nosotros mismos. Es evidente que ahora esa amenaza es más que real, estaríamos en el punto crucial de intervención pues hemos llegado al nivel tecnológico donde la autodestrucción es más que probable y real. Por muchas barbaridades que haya hecho el hombre, y hemos hecho muchas, jamás ni durante el imperio Romano, la Edad Media o incluso la I Guerra Mundial hemos tenido la capacidad que tenemos ahora de hacernos daño. Por eso sería ahora más probable y no antes.

La otra posibilidad es obvio que apunta a que los platillos volantes se traten de prototipos militares. Hace pocos días saltó la noticia de que fuentes secretas habían afirmado que los famosos OVNI en forma de triángulo en verdad son un prototipo muy avanzado de aeronave que estaría propulsada por antigravedad. Estos ingenios habrían sido desarrollados desde el final de la II Guerra Mundial a partir de ingenios nazis. Sabemos que la tecnología militar siempre está avanzada respecto a la civil, internet es un ejemplo significativo, pero ¿tiene sentido ocultarla 40 años? ¿Hacer semejantes esfuerzos? Sí, pues esa tecnología os podéis imaginar que cambiaría nuestro mundo por completo. Por de pronto él petróleo simple y llanamente sería inservible, mucha gente habría dejado de ganar muchos centenares de miles de millones con el negocio del oro negro. No, a los que en verdad gobiernan el mundo y que son los mismos que financian y desarrollan estos proyectos tecnológicos, no les convendría en absoluto desvelar semejantes ingenios hasta haber exprimido la última gota de gasolina. Sí, por esa cantidad de dinero les habría valido la pena organizar semejante cortina de humo con los OVNI durante tantos años. Pero algunas declaraciones me hacen dudar, como la que realizó Ben Rich, el "Padre del Stealth Fighter-Bomber" y ex Consejero Delegado de Lockheed Skunk Works, el mayor contratista militar de los USA a quien dota de casi todos los misiles balísticos y buena parte de su Fuerza Aérea. Ben, en su lecho de muerte, filtró  la información de que  los visitantes extraterrestres eran reales y que EE.UU había copiado su tecnología a través de aeronaves recuperadas... ¿Estaba lanzando un último globo sonda o contando la verdad sabiendo que se moría?

Como veis, en definitiva las dos opciones son plausibles, ahora deberéis ser vosotros quienes ahondéis más, investiguéis y lleguéis a vuestras propias conclusiones. Yo ya he llegado a un punto en el cual no me sorprendería ninguna de las dos.



 

viernes, 6 de mayo de 2016

¿Qué querría una civilización extraterrestre?

La semana pasada vimos como los diferentes gobiernos, especialmente el estadounidense a través de Hollywood, han tratado de crear una imagen concreta sobre los extraterrestres en la consciencia colectiva de la sociedad. Como ésta ha ido variando desde los malvados aliens que venían a conquistarnos de principios de los 50, a otros más amables y amistosos o incluso a algunos que llegaban a nuestro planeta en modo de refugiados. Pero, ¿alguna vez os habéis parado a reflexionar que es lo que querrían esos seres de nosotros? ¿Serían agresivos? ¿Pacíficos? ¿Se parecerían físicamente a los humanos?
 
Creo que vale la pena y sería divertido detenerse en estas cuestiones y hacer un poco de reflexión-ficción sobre la naturaleza de esos seres de otros mundos. Me apoyaré sobre los diferentes extraterrestres que nos ha mostrado el cine para hacer mis reflexiones.
 
Lo primero es lo primero y es averiguar cómo sería su aspecto. El cine y los dibujos nos los han mostrado de mil formas: desde seres casi humanos, criaturas reptilianas, pequeños hombrecillos verdes con antenas, azules como avatar, monstruos indescriptibles como alien, predator... Y por supuesto los más famosos de todos ellos: Los grises. Todos los que tienen una naturaleza inteligente parecen disponer de manos más o menos diferentes a las nuestras, pues la ciencia no imagina un mecanismo más apto para crear objetos (la capacidad base de toda civilización) que nuestros dedos. Y sí, a mí tampoco se me ocurre otra forma... En cuanto a su tamaño, color o forma supongo que en este vasto universo encontraremos vida inteligente de todo tipo, tamaño, color y forma. Así que cualquier alienígena que nos ha mostrado Hollywood no veo por qué no pueda existir. En este punto no tengo nada que objetar, todo es posible con una puntualización: Nuestra base orgánica es el carbono, la suya no tiene por qué serlo, pueden estar creados a partir del silicio, del azufre o del elemento que queráis...


Klatuu y su robot Gort
A decir verdad, si fuese cierto que una raza alienígena acabase de descubrir nuestra existencia no puedo imaginarme que viniesen ellos en persona, al menos al principio. De nuevo hemos de recordar que su tecnología debe estar a años luz de la nuestra por lo que me es difícil imaginar una nave de exploración tripulada por otra cosa que no sean robots o máquinas. ¿No es lo que haríamos nosotros? O Mejor, ¿acaso no enviamos primero sondas a la Luna y ahora a Marte antes de enviar astronautas? Antes esperaría que descendiese por la rampa de una nave alien un robot  que no un ser vivo. Por ejemplo, en la famosa película: "Ultimátum a La Tierra" (The Day the Earth Stood Still) esperaría ver antes a Gort (El robot destructor) que a Klatuu... O que enviasen un dron increíblemente avanzado que escanease nuestro mundo para preparar su llegada. Tal y como lo veo, si es cierto que esos seres están visitando nuestro planeta en persona, deben de hacerlo desde hace muchísimo tiempo. ¿Pero porqué venir hasta este pequeño rincón de la Galaxia?
 
Hollywood nos ha mostrado como los aliens invadían nuestro modesto mundo, como trataban de quedarse con nuestro planeta y a héroes humanos, como William Smith en Independence Day, salvarnos de una invasión que amenazaba con extinguir a la humanidad. La verdad es que es muy ingenuo pensar que la humanidad pudiese plantar ni tan siquiera cara a una raza con tecnología capaz de cruzar la galaxia. Es como si todo el ejército americano tratase de invadir una tribu de no contactados del amazonas y éstos lograsen derrotarlos... Imposible ¿verdad?  Así que siento daros malas noticias, si algún día vienen con intenciones aviesas no tenemos nada que hacer... ¿pero por qué querrían ser belicosos contra la humanidad?
 
Los motivos que se han aducido para tan maquiavélicos y malvados planes siderales son diversos: Búsqueda de agua y/o de comida como en la famosa serie de los 80: V, buscando un planeta habitable, por los recursos minerales, o incluso en busca de refugio y asilo como en Distrito 9... ¿Tiene sentido algo de todo eso? Os quiero tranquilizar: la verdad es que no. De nuevo pongámonos en situación: tecnología salvaje. ¿Alguien puede creer que si son capaces de venir de un lugar a decenas o centenares de años luz, no son capaces de crear su propia comida? ¡Si nosotros estamos ya creando incluso carne desde células madre imaginaros lo que pueden conseguir ellos!... O agua... ¿Por qué venir a La Tierra a por el líquido elemento si por ejemplo Europa, el satélite de Júpiter y que es dos veces el tamaño de la Luna, es una inmensa bola de hielo? Eso sin contar que deben ser más que capaces de terraformar cualquier planeta para adaptarlo a sus condiciones de vida... No tiene sentido tampoco que busquen un lugar donde vivir ¿No creéis? Además, ¿podríamos comer nosotros cualquier cosa que encontrásemos en los planetas habitables que hay en nuestro "vecindario"? ¡Por Dios, si vamos a algún lugar fuera de nuestro ámbito y se nos descompone el estómago!
 
Lo de buscar tierras que conquistar para extraer minerales es también un despropósito. ¿Acaso nuestro propio sistema solar no está lleno de sideritos, rocas, planetas deshabitados que tienen  miles de millones de toneladas de cualquier metal o elemento que necesiten? La Tierra, comparada con satélites, cometas o rocas espaciales que deben ser de hierro, uranio, plata, u oro macizo, debe ser una mina más bien pobre. ¿Se molestaría una compañía humana a destruir un lugar y matar a sus habitantes por 10 kilos de plata? La respuesta es no. Los contras son mucho más numerosos que los pros. También hemos de tener en cuenta que sus sistemas de energía y habilidades técnicas serán de tal calibre que sus necesidades de materia bruta o energía serán muy diferentes. Es posible que ellos saquen su combustible de energía residente en el espacio sideral, que su auto-abastecimiento y aprovechamiento de material sea cuasi perfecto. Incluso no tiene sentido la humanidad de la película Avatar, arrasando su planeta por minerales.., ¿Acaso ya habríamos consumido todos los recursos de nuestro sistema? ¿De Marte, Saturno, Urano, de los centenares de mini planetas del sistema de Kuiper? ¿En ese caso no deberíamos estar más avanzados en el tiempo, tecnológica y mentalmente? ¿Seguiríamos con las guerras? La película como  entretenimiento o mensaje de respeto a la naturaleza es simplemente genial, pero no le veo sentido como visión de futuro.

 
 
Entonces, si nos visitan... ¿por qué lo hacen? - os preguntaréis, por lo mismo que lo haríamos nosotros: curiosidad científica. Si tuviésemos la capacidad de viajar a estrellas cercanas y encontrásemos un planeta habitado con una civilización inferior a la nuestra, por ejemplo como en AVATAR, al igual que hacemos con las tribus de no contactados, simple y llanamente observaríamos su evolución pues los recursos que supuestamente necesitáramos los podríamos hallar con total seguridad en cualquier otro planeta de ese sistema. No creo que los colonizáramos pues el día que pudiéramos llegar hasta allí ya podríamos vivir en Marte, La Luna, Venus o las decenas de satélites de Júpiter o Saturno... mucho solar a la vuelta de la esquina ¿verdad? Solo intervendríamos si esa especie estuviese a punto de la extinción o de llevar al colapso su propio planeta pues para nosotros no serían amenaza alguna como especie. Tampoco contemplo una civilización agresiva porque sí, pues para llegar a ese nivel de tecnología han de pasar decenas de miles de años de evolución, cultura e inteligencia. Por muy mal que este la humanidad a día de hoy, si miramos hacia atrás en la historia hemos avanzado mucho en derechos sociales, laborales, relaciones humanas... No, alguien que nos lleve miles de años de ventaja debe de haber dejado de lado la violencia.


Solo los humanos, por nuestra naturaleza, podríamos hacer que nos viesen como una amenaza, no hacia ellos si no hacia el planeta. Es probable que si viesen que el equilibrio ecológico estuviese al borde del colapso interviniesen de alguna forma que no sería, con absoluta seguridad, evidente o en forma de "invasión militar". Películas como Independence Day para mí no tienen sentido, con su tecnología ¿para que van a  enviar un ejercito si nos pueden eliminar de forma limpia y rápida con una enfermedad, un veneno esparcido en el aire... o lo que os podáis imaginar? Hay otra posibilidad poco probable por mucho que Hollywood nos la haya mostrado muchas veces, y es que nos veamos inmersos en una guerra entre dos imperios siderales... Su nivel de conciencia debe ser muy elevado si han sobrevivido a la tecnología, por lo tanto dos mundos avanzados es más que probable que encontraran puntos de encuentro. 

Así que aunque estén viniendo a estudiarnos, sinceramente no creo que debamos preocuparnos como especie. Nuestra civilización es otra cuestión, pues es cierto que el día que se produzca el contacto, si es que se produce, nuestro mundo se volverá del revés y probablemente nuestra actual forma de vida desaparezca y nos veamos asimilados por su cultura, como ha ocurrido tantas veces con los colonizadores europeos al largo del mundo. Si os he de ser sincero no hay cosa que más desee porque tal como vamos... vamos mal, muy mal y a buen seguro su sociedad será infinitamente mejor... ¿Pero estamos cerca de ese contacto? La semana que viene cerraremos este ciclo de artículos sobre los alien con una serie de declaraciones de los líderes mundiales sinceramente sorprendentes.